domingo, 30 de agosto de 2015

La combinación perfecta: Masaje Hindú, Sueco, Reflexología y Yoga.

La Secuencia del Masaje Infantil propuesta por la Asociación Internacional de Masaje Infantil, procede de cuatro fuentes principales: El masaje hindú, el masaje sueco, el yoga y la reflexología.
A continuación veremos en qué consiste cada uno de ellos para entender por qué es tan importante que estén incluidos dentro de la rutina.

El Masaje Hindú, también conocido con el nombre de Shantala, tiene como objetivo ayudar a los padres a establecer un vínculo cercano con el bebé, favoreciendo la comunicación no verbal, colaborando también con el desarrollo sensorio motriz.  



El Masaje Sueco,  está destinado a aliviar tensiones y relajar las articulaciones. Favorece la circulación sanguínea y la linfática, ayudando al cuerpo a encontrar su equilibrio natural.




El Yoga, estimula la energía vital, devolviendo al cuerpo el equilibrio y la armonía. Colabora con la relajación, armonizando las principales funciones fisiológicas. 



La reflexología, ayuda a reducir la tensión, el estrés, mejorando los patrones del sueño. Alivia tensiones gastrointestinales, espasmos, cólicos y estreñimiento.




La Asoc. Internacional de Masaje infantil combina estas cuatro antiguas disciplinas, creando una secuencia única que posee varios beneficios, teniendo siempre como objetivo, promover el contacto nutritivo de padres a bebés.

El Taller de Masaje Infantil de Pequeño Mundo transmite a los padres la Secuencia de la IAIM, que colabora con el apego seguro, el contacto nutritivo y enriquecedor.  

Gracias por leerme,

Yanina Benasus 

miércoles, 12 de agosto de 2015

Masajes Infantil + Amor = Pequeño Mundo

En Pequeño Mundo nos interesa que además de que los padres aprendan la secuencia de Masaje Infantil propuesta por la Asoc. Internacional de MasajeInfantil, la mamá y el papá encuentren un espacio de contención, armonización e interacción. 


Por eso en Pequeño Mundo asumimos que en el momento que la mamá asiste a las clases de Masaje Infantil está atravesando su “Puerperio” y que éste periodo se caracteriza por una cantidad de cambios físicos, emocionales y psicológicos. Por eso, la finalidad de los talleres es acompañar a la mamá en este proceso de cambios y proponer temas de interés común que puedan estar preocupando a la mamá y al papá, como ser el sueño del bebé, el llanto del bebé, etc.


 


En cuanto al papá, como los primeros meses el intercambio se da principalmente entre el bebé y la mamá, el taller le otorgará una herramienta más de acercamiento al bebé, para aprender a conocerlo.







Además de pensar en los papás, en Pequeño Mundo respetamos los momentos de los bebés. Por eso contamos con muñecos para trabajar sí el bebé llega dormido a la clase. Trabajamos únicamente en los estados de alerta tranquila ya que cuando el bebé se encuentra en este estado, puede establecer una interacción completa, es decir,  se hallará dispuesto y disponible para lo que los padres y los estímulos del medio externo puedan ofrecerle. Sí respetamos sus periodos de sueño, cuando el bebé esté despierto mantendrá la atención, la disponibilidad y la capacidad de aprender y reconocer.






En el Taller de Masaje Infantil de Pequeño Mundo enseñamos la rutina anticólicos, fundamental para los primeros meses de vida. Durante la noche, muchos bebés se despiertan debido a cólicos, gases y malestares estomacales. Para aliviar estos estados, proponemos una rutina que con sus respectivas repeticiones, la cual contribuye activamente a la eliminación de gases y cólicos. 

En este espacio, los papás no sólo incorporan los movimientos del Masajes Infantil, sino que aprenden, a través de la comunicación no verbal, las señales de sus bebés que les permitirán un mejor acercamiento, en un ambiente cálido y claro para poder mirarse con facilidad y comenzar a entender las expresiones de sus hijos.



Todo eso genera que el Taller de Masaje Infantil de Pequeño Mundo se transforme en un espacio de amor incomparable, que colabora positivamente con el desarrollo del bebé.








Como siempre, gracias por leerme.

Yanina